«no hay raza dominante, una raza no se define por su pureza, sino, al contrario, por la impureza que le confiere un sistema de dominación» Deleuze y Guattari

por Juan Pablo Anaya

“Pues: ¿cómo hacer para que el tema de una raza no se convierta en racismo, en fascismo dominante y englobante, o más simplemente en aristocratismo, o bien en secta y folklore, en microfascismo? (…) una vez más, los criterios de distinción son fáciles, cualesquiera que sean las mezclas de hecho que los oscurecen a tal o tal nivel, en tal o tal momento. La tribu-raza sólo existe al nivel de una raza oprimida, en nombre de una opresión que padece: toda raza es inferior, minoritaria, no hay raza dominante, una raza no se define por su pureza, sino, al contrario, por la impureza que le confiere un sistema de dominación. Bastardo y mestizo son los verdaderos nombres de la raza. Rimbaud ha dicho todo lo que había que decir sobre este punto: sólo puede apoyarse en la raza el que dice: ―siempre he sido de raza inferior, (…) soy de raza inferior desde toda la eternidad, (…) heme aquí en la playa armoricana, (…) soy una bestia, un negro, (…) soy de una raza lejana, mis padres eran escandinavos.” (MM: 384)