La fuerza del destino
por Juan Pablo Anaya
«La Biblia Vaquera es como las Matemáticas Negras o como un Little Brown Book. Antes de cada pelea, en el vestidor abría mi Biblia frente a un altar dedicado a Yemayá, Eleguá, Changó, Ochún y Obatalá. Ofrecía en sacrificio cualquier sencillo pop que sonara en la radio y me comía su corazón de pollo… Era un mano a mano contra el Gran Markus. En la oscuridad de mi vestidor, poseído y desnudo, sacrifiqué un single de Mecano. Sentí malilla… cuando me trepé al ring con La Biblia Vaquera en mano. La presumí al público, a los bomberos, la policía, la prensa. Coloqué la mano sobre mi coraza y prometí cumplir con la Ley de Murphy. Sonó la campana y el Gran Markus me dijo Quita tu chingaderita Wrangler y vamos a jugar billar. Lo derroté en dos caídas. La primera y la segunda.»