Chaplin es mi madre
por Juan Pablo Anaya
«Para Donald Winnicott, la madre gracias al cuidado que brinda a todo niño que aún no habla, le enseña que la vida merece ser vivida. Es ella quien instala en él dicho sentimiento. [Esta madre, la ‘madre buena’ puede, evidentemente, ser el padre o también una nodriza –y finalmente todo poder psíquico benévolo y protector. Dicha situación constituye la fuerza misma de The Kid, en donde Chaplin juega de maravilla el rol de la madre.
He señalado ya en otra parte que Moisés y Jesús son los niños adoptados, el primero por Yokébed y Amram, el segundo por José, mientras que el Corán define la filiación no por la sangre sino por la leche. Lo anterior significa que el cuidado es aquello que hace posible un proceso de adopción –del niño adoptado por su madre, y del objeto transicional por la pareja madre-niño, donde eso que nombramos ‘la madre’ es el educador a través de la cual se crea eso que Bowlby describe como la relación de apego– como en el caso de Charlote y de Kid.]»
Bernard Stiegler, traducción de Nadia Cortés