«Mientras la llevaba a casa en coche desde el bar, mi amiga Suzie me habló del verdadero significado de la representación de la Justicia con los ojos vendados y la balanza» Rebeca Solnit

por Juan Pablo Anaya

“Mientras la llevaba a casa en coche desde el bar, mi amiga Suzie me habló del verdadero significado de la representación de la Justicia con los ojos vendados y la balanza. Suzie estaba dibujando su propia baraja de cartas del tarot y reconsiderando el contenido de cada carta antes de pintarla. Según un libro sobre la tradición clásica, la Justicia estaba a las puertas del Hades para decidir quién podía entrar, y entrar significaba haber sido elegido para mejorar como persona a través del sufrimiento, la aventura, la transformación, para emprender un camino que, a través del castigo, conducía a la recompensa que es el yo transformado. Visto así, ir al infierno parece otra cosa. Esto también sugería que la justicia es algo mucho más complicado e inconmensurable de lo que a menudo nos imaginamos; que, si al final todo va a quedar compensado, ese final está más lejos de lo que pensábamos y resulta mucho más difícil de medir. También sugiere que acomodarse en una vida fácil puede ser señal de que se ha abandonado por el camino. Vete al infierno, pero sigue avanzando una vez que estés allí y sal transformado. Al final, para representar la justicia, Suzie dibujó un grupo de campistas reunidos alrededor de una hoguera, ya que decía que la justicia es ayudarnos unos a otros por el camino. Otra noche, la pareja de Suzie, David, me estuvo hablando de un biólogo hawaiano al que había conocido, que se dedica a perderse a propósito en la selva para descubrir nuevas especies.”

Rebeca Solnit, «La puerta abierta» en «El arte de perderse»